Del viento
Algunos días existir sólo es estar... una de las cosas que se piensan una vez que se ha comprendido el potencial depresivo del invierno. Peor para los claustrofóbicos. Da la impresión de que el corte helado del viento tiene algo de saludable. Es como el mundo gritándote que sí está, que no dudes que es real y se impondrá a pesar de.... Y no se te olvide que tus huesos también pueden sentir. Es un ancla, el último intento de los dioses para hacerse respetar, para demostrarte que pueden arruinar tu día, incluso de antemano, cuando los devaluados profetas televisivos te dicen con mal disimulada alegría que habrá "posibles chubascos".
Por eso hay que ir cantando por la calle aunque se te congele el alma, y si se puede, jugar a ser Batistuta con alguna botellita que mancille el orgullo de la comuna de Ñuñoa.
Arte: Fuegos del sur
Algunos días existir sólo es estar... una de las cosas que se piensan una vez que se ha comprendido el potencial depresivo del invierno. Peor para los claustrofóbicos. Da la impresión de que el corte helado del viento tiene algo de saludable. Es como el mundo gritándote que sí está, que no dudes que es real y se impondrá a pesar de.... Y no se te olvide que tus huesos también pueden sentir. Es un ancla, el último intento de los dioses para hacerse respetar, para demostrarte que pueden arruinar tu día, incluso de antemano, cuando los devaluados profetas televisivos te dicen con mal disimulada alegría que habrá "posibles chubascos".
Por eso hay que ir cantando por la calle aunque se te congele el alma, y si se puede, jugar a ser Batistuta con alguna botellita que mancille el orgullo de la comuna de Ñuñoa.
Arte: Fuegos del sur