De lógicas thunderianas



Llegaron en plan de descubridores y portadores de la verdad. El lugar se llamaba Tercer planeta y al parecer era pequeño, pero de condiciones geográficas variadas, desde bosques tropicales hasta tundra. Eran buenos amables, eficientes, diligentes, cuadrados y algo ñoños. En general se dedicaban a sacarle la mugre a los mutantes y a Mumm-Ra el inmortal o a recoger muestras con fines científicos. Se sabe poco sobre sus hábitos privados, pero resultaría natural imaginar una situación de constante tensión por la presencia de tres machos alfa y una sola hembra en condición reproductiva. La armonía constante podría explicarse con el supuesto de que Tigro ("Tygra") y Panthro fueran pareja (lo que explicaría que casi siempre estuvieran juntos en el tanque felino cuando recibían la llamada de la espada del augurio "sword of omens") y que la experimentada Cheetara iniciara al joven señor de los thundercats, Lion-O en la actividad sexual, situación que refrendaría simbólicamente su posición de poder .

Estos felinos humanoides estaban seguros de tener la misión casi sagrada, a lo Bush, de mantener un status de justicia permanenete en su tierra adoptiva y contaban con la tecnología instrumental y el know how para frustrar las pretensiones imperialistas de los mutantes (que eran cuatro, cinco contando al esporádico Rataro) y de Mumm-Ra el inmortal, que era muy poderoso pero podía ser facilmente derrotado por el reflejo de su propia imagen, como las gorgonas griegas. Varias veces se vieron en posición de desarticular definitivamente el potencial agresor de sus enemigos, encerrándolos, desterrándolos o (Yaga me perdone por sugerirlo) incluso matándolos en leal combate (menos a Mumm-Ra por obvias razones) pero invariablente los dejaban escapar y se regocijaban con su humillación.

Este patrón de conducta en los thundercats me lleva a sugerir que su fin último no era garantizar la paz y libertad de las criaturas pacíficas del tercer planeta, sino refrendar para si mismos y para los demás su situación de héroes y protectores de la justicia y el bien. Ante la eliminación de los mutantes y Mumm-Ra, a la que seguiría seguramente la de los Lunattacks y los piratas de Mano de martillo ("Hammerhand"), los thundercats perderían su razón de ser y acabarían buscando el mal en todas partes, ante lo que cualquier manifestación de desorden en el tercer planeta se convertiría en motivo para entrar en acción. Los controles se volverían más férreos. Primero los berbils (esos ositos robóticos) tendrían que cuidarse de no decir cosas como "Panthro apesta", " La Cheetara está bien buena" o "Tigro es maricón" y eventualmente serían obligados a entregar tributos. Después la represión pasaría a otros ámbitos y las amazonas podrían ser castigadas por sus inmorales atuendos...

En el fondo los thundercats intuyen lo que pasaría y como en realidad son muy buenos, lo temen. Por eso perdonan a sus enemigos. Yaga también lo sabe y asiente, satisfecho.

Arte: Simeon Aston